miércoles, 30 de enero de 2013

Mi esperanza de vida


Siempre que empieza un nuevo año fotografío mi rostro. Como estoy seguro de que viviré hasta lo 127 años, espero tener entonces más de un centenar de fotografías y, desde la tumba, poder mostrar algo sobre la evolución de esta cara que me ha tocado. Será mi Testamento Fisonómico. Ya sé que no invento nada, que otros ya han hecho cosas así, y seguramente mejor que yo. Pero lo hago con mi cara, que para eso es mía, para hacer con ella lo que me dé la gana. Así que será en el año 2102 cuando, tras mi fallecimiento, salgan a la luz todas esas fotografías que he ido realizando al comienzo de cada nuevo año. Tal vez a nadie le interese contemplar el deterioro de mi rostro. Pero a veces, tanto en la vida como en la muerte, hay que correr ciertos riesgos, tan absurdos como ese.


viernes, 18 de enero de 2013

"El general y la musa" en mis manos


Ayer llegaron a mis manos algunos ejemplares de la nueva novela de Román Piña Valls, "El general y la musa", en la que colaboro con el dibujo de portada y alguna que otra sorpresa en el interior (A la venta a partir del 28 de enero, Editorial Sloper, Mallorca, www.editorialsloper.es).

lunes, 14 de enero de 2013

Lejos de Veracruz

Mercería Veracruz (Acrílico sobre lienzo, 54 x 81 cm, 2012)

Hay encargos que son toda una alegría. Hace pocos meses me encargaron realizar una pintura de una mercería coruñesa llamada Veracruz. Como el inmueble va a ser demolido, a los hijos de los dueños del establecimiento se les ocurrió regalarles a sus padres un cuadro del lugar en el que habían pasado media vida y que pronto desaparecerá por completo.
Ese detalle hace que la pintura en cuestión pudiese formar parte de aquella serie que realicé entre 2006 y 2007 y que llevaba por título "Demasiada calma en la ciudad", serie en la que retrataba lugares de mi ciudad natal que no aparecían en las postales, pero que eran lugares reconocibles por formar parte de la memoria de cualquier urbanita coruñés. Eran, además, lugares que habían desaparecido o estaban a punto de desaparecer. Así que cuando me propusieron el encargo de retratar la fachada de la mercería Veracruz, no lo dude ni por un momento. Me enviaron por mail unas cuantas fotografías y, lejos de Veracruz, desde Bilbao, sin pisar para nada mi ciudad natal, realicé el retrato de esa mercería que pronto habrá sido borrada del mapa de la memoria urbana coruñesa.
(Para ver las pinturas de la serie "Demasiada calma en la ciudad" pinchar AQUÍ)

miércoles, 9 de enero de 2013